Los versos de un poeta hablan de un tiempo precario que desdice de la vida. Solo de versos puede mantenerse un país donde los jóvenes poetas son acribillados antes que sus versos vean la luz.
Usualmente los versos son tímidos, silenciosos y furtivos: viven en mochilas o en cuadernos que sus autores guardan con enorme celo y que apenas conocen las musas que los inspiran; uno que otro cofrade y el propio cielo que sirvió de cúpula.
Cuando Víctor Martínez Piñate, padre de Mijail, descubrió un pequeño morral que para nadie pasaba de ser más que un morral, encontró todos los silencios, cariños y desvaríos que Mijail, el hijo arrebatado por la canalla, guardaba con celo.
El morral pesaba más que el plomo, sin guardar piedras o metal. De su interior brotó todo lo imaginable; la arena de playa derramó las ventanas de la casa. Lo siguió una marejada inundando hasta las lágrimas, que por todas partes dejó su aciaga muerte.
Durante días la mochila, regurgitó esos secretos, posturas e imposturas que Mijaíl escribía y que su padre se encargó de reunir y publicar.
Sus poemas son un presagio, en uno de ellos, Antes del fin, describe el evento:
Nada más que ayer,
antes del fin
es que podía respirar.
no logro entender
ni por qué
de lo que ocurre a mi cuerpo.
Quizás es la enfermedad
que traigo la que
me paraliza y me abisma,
hacia una dimensión desconocida.
Le digo enfermedad
Porque se parece al desamor
Alimentado del odio
que respiramos
a cada segundo
En vez de estar
Amándonos.
Mijail describe los males de su tiempo: el odio, la violencia, el desamor y se hace víctima de ellos.
La canalla manchó de sangre el piso de la ciudad, el estado, el país, e hizo del mundo algo marchito.
Mijail fue una víctima de la cruel guerra que el odio y el desamor conculcan. Su sangre impune da cuenta que todo falla; hace tiempo todo falla.
Los poemas de Mijaíl y Mijaíl poeta no tuvieron tiempo para presentarse. Nadie sabía que escribía. Para su familia resultó una sorpresa conseguir arena, agua paisajes y tormentas en todo lo que creían poemas casi disecados.
Allí encontramos un parámetro que determina su obra. Se estaba asiendo de la palabra y descargaba en la escritura su visión emergente.
Mijail nunca divulgó su poesía puesto que, evidentemente, no escribía con ese fin. Aparte, que no tuvo tiempo para pensar en ello.
La canalla le impidió fraguar ese universo íntimo, personalísimo de su inacabada obra poética.
Al margen de las bulas poéticas, la escritura de Mijail resulta en la descripción de un tiempo poético.
Su poesía es un oasis que se dilata de sus compromisos profesionales y políticos, Mijail era el productor del programa “Victoria Popular” que moderaba su padre. Participó en la creación del Comité de Víctimas Contra la Impunidad del estado Lara, y en el momento de su asesinato se encontraba produciendo un filme sobre la desigual lucha que enfrenta no sólo la región, sino el país..
Grabé varios programas de televisión con él; viajamos por pueblos y lugares, pude conocer y palpar su extraordinaria calidad humana y creativa, y recuerdo que en algún momento me ofreció mostrarme unos poemas.
Conozco las profundidades del abismo que sigue a la pérdida de un hijo, más cuando éste nos es arrebatado por el desamor y el odio
Los poemas de Mijail son una sonrisa, una marea leve, una luz tenue que más allá de preocupaciones estilísticas pretende llegar al fondo del corazón amado
Sin Título
Leo Buscaglia
teorizó el amor
La ejemplificación hecha
verbo y carne la vivo contigo
día a día, noche tras noche
eres la realeza sutil
que enfoca mis sentidos
Sin duda Mijail llegó temprano a todo: a la poesía, a la vida y a las entrañas del monstruo que se alimenta de nosotros.
Carlos E. López Falcón
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